Bitcoin consume entre el 0.1 y 0.3 % de la energía del mundo
- La gran cantidad de energía usada en Bitcoin, trajo consigo la preocupación sobre el impacto ambiental de esta divisa digital.
- Nature Climate Change, advirtió que las emisiones causadas por Bitcoin, por sí solas, podrían producir suficiente CO2 para impulsar el calentamiento global por encima de los dos grados Celsius en menos de tres décadas.
Hoy en día las criptodivisas o dinero digital, ha tomado una mayor relevancia a nivel mundial, sobre todo por las subidas y bajadas del valor del Bitcoin y por el anuncio del lanzamiento de Libra, el activo virtual de Facebook.
Debido a la creciente participación que tienen las criptomonedas en los noticieros, han empezado a aparecer diversos temas relacionados con ellas y su uso, uno de ellos vinculado al sector energético, destacando el uso de energía por parte de estas divisas digitales, en particular del Bitcoin.
Desde que este activo digital se disparó en 2017, momento en el que la divisa digital obtuvo un valor aproximado de 20 mil dólares por unidad, cuando la moneda pasó de 10 mil a 18 mil dólares en solo 17 días, varias personas e instituciones fijaron su atención en la huella ambiental y energética de la criptomoneda.
Ese año, el crecimiento de la tasa del uso de energía de la minería de Bitcoin creció un 25% por mes de acuerdo con el World Economic Forum. Con este crecimiento se calculó que para el 2019, minar Bitcoin consumirá tanta electricidad como los EE. UU., pero de acuerdo con la Agencia Internacional de la Energia (IEA) se consume entre el 0,1 y 0,3% del uso de electricidad a nivel mundial.
El año pasado, los investigadores del MIT realizaron el primer análisis del consumo de energía de Bitcoin con base en datos empíricos titulado “La Huella de Carbono del Bitcoin” (The Carbon Footprint of Bitcoin). Este estudio arrojó que las emisiones de carbono de este activo digital se corresponden con las de Kansas City, de casi medio millón de habitantes, al igual que con las de un país pequeño.
Energía usada en Bitcoin
De acuerdo con el MIT, tanto el Bitcoin como otras criptomonedas dependen de la tecnología de la cadena de bloques -blockchain- para subsistir, ya que brinda una red segura sin necesidad de depender de un tercero. Ahora bien, para “minar” Bitcoins -proceso a través del cual Bitcoin y otras criptomonedas son creadas- es necesario contar con un sistema que garantice que no existirá ningún tipo de fraude por medio de la validación de cada uno de sus miembros, al igual que de las transacciones realizadas online.
En el caso del Bitcoin, el consenso se logra mediante un método llamado "Prueba de trabajo" (PoW), donde las computadoras de la red -los mineros- resuelven diversos acertijos numéricos complejos, proceso que requiere una gran cantidad de poder computacional y por ende, requiere de una buena cantidad de energía para llevarse a cabo.
No obstante, este no es el único gasto energético que se realiza con el minado del Bitcoin, ya que es necesario considerar también, el consumo de energía realizado por infraestructura no informática, como lo son la refrigeración e iluminación.
"Este proceso produce un inmenso consumo de energía, lo que se traduce en una importante huella de carbono", indicó Christian Stoll, investigador del Centro de Mercados Energéticos de la Universidad Técnica de Munich, Alemania, y el Centro de Investigación de Políticas Energéticas y Ambientales del MIT, en el citado estudio.
El desarrollo tecnológico para generar Bitcoins
Entre más avanza la tecnología, también lo hacen los métodos para conseguir esta divisa digital. La infraestructura para la extracción de Bitcoins en sus primeros días (2009), se utilizaban unidades de procesamiento central (CPU) estándar. Un año después, “los mineros” comenzaron a utilizar unidades de procesamiento de gráficos (GPU) más potentes, a medida que aumentaba la dificultad de extracción.
Para junio de 2011, los mineros industriales utilizaron un hardware de matriz de puertas programable en campo ( field-programmable gate array o FPGA por sus siglas en inglés) más potente pero menos eficiente energéticamente hablando, y un año más tarde, se trasladaron a circuitos integrados de aplicaciones específicas ( application-specific integrated circuits o ASIC por sus siglas en inglés).
En este sentido, entre más potente el sistema para minado de Bitcoins, más gasto de energía se requiere para realizar dicho minado.
Sin embargo, el uso de diversas metodologías, la disponibilidad limitada de datos y las condiciones altamente variables en la industria (hardware de minería; precio de la electricidad y refrigeración) hacen que el hecho de dar un estimado de cuál es el uso energético del Bitcoin sea difícil, razón por la que es necesario que cada estimación deba ser interpretada con cuidado.
Según las estimaciones recientes publicadas del consumo de electricidad de Bitcoin, estas son aproximadamente de entre 20 a 80 TWh anuales,
Bitcoin y el cambio climático
La temática del uso energético del Bitcoin, trajo consigo la preocupación sobre el impacto ambiental de esta divisa digital.
Un artículo publicado por el portal Nature Climate Change, advirtió que las emisiones de Bitcoin por sí solas, podrían producir suficientes emisiones de CO2 para impulsar el calentamiento global por encima de los dos grados celsius en menos de tres décadas.
Aunque bitcoin y las demás altcoins han significado un cambio importante en la economía a nivel mundial es necesario buscar deberíamos buscar recursos que reduzcan el impacto climático que se está generando a través de la minería.
Buscar alternativas renovables y amigables con el medio ambiente también podría tranformarse en beneficios para los mineros pues de acuerdo al World Economic Forum, con el crecimiento en el uso de la electricidad, el 60% de los ingresos de una minera de Bitcoin se gastaría en costos operativos, incluidas las facturas de electricidad.