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En la cotidianidad del ecosistema cripto leemos palabras como PoW, PoS, consenso, minería, dificultad, escalabilidad, costos de transacciones y demás. Conceptos un poco desconocidos pero vitales para entender perfectamente que es lo que ocurre en el ecosistema.
Para el estudio y análisis de las criptomonedas es necesario saber a que se refieren estos conceptos. En esta ocasión nos enfocaremos en explicar que el POS o Proof of Stake.
Al igual que el Proof of Work (PoW), Proof of Stake (PoS) es un algoritmo de consenso, el cual fue presentado al público en el año 2011 como el algoritmo revolucionario capaz de resolver todos los problemas que el primer y original método, el PoW, presentaba.
Algunos de los problemas que presentaba el PoW eran la lenta velocidad de transacción, la pobre posibilidad de escalabilidad, los altos costos de transacción y el excesivo consumo eléctrico que tanto daño le estaba haciendo al medio ambiente.
La introducción del PoS también ayudaría a eliminar la probabilidad de que ocurriera un 51% attack, que implica que un grupo o una persona posea la más de la mitad del poder de cómputo generado por los mineros de Bitcoin. Al tener el control de la mayor parte de la red este grupo o persona tendría la facultad de poder realizar cualquier tipo de acción sobre las transacciones que se generaron.
Si bien tanto el PoW y el PoS, comparten el mismo objetivo de llegar al consenso de la red para validar las transacciones, el proceso para alcanzarlo es totalmente diferente.
PoS migró de la validación de transacciones por unas máquinas que consumen excesiva electricidad y hacen demasiado ruido, a una versión digital. En este “nuevo” método de consenso, los mineros, en este caso llamados “Forgers”, no compiten entre sí mediante el poder de cómputo mediante la potencia de sus equipos, ya que el poder de cómputo es asignado por la misma red de acuerdo al porcentaje de criptomonedas que retienen los mineros.
Por ejemplo, en vez de que los mineros gasten dinero en costosos equipos y desperdicien poder de cómputo luchando unos con otro resolviendo los mismos problemas, en PoS un Forger que posea un 3% de la oferta total de la criptomoneda disponible, sólo podrá extraer un 3% de los bloques.
El algoritmo de prueba de participación es considerado como una de las mejores opciones a métodos de consenso disponibles actualmente debido a que el costo energético que requieren es menor que el del PoW, el nivel de seguridad que ofrece, ofrecer descentralización y el nivel de escalabilidad que le puede brindar las criptomonedas que lo usan.
Para profundizar en cada una de estas ventajas, analicémolas punto por punto
Las minería de criptomonedas que utilizan el algoritmo de PoS son altamente eficientes energéticamente comparados con su contraparte PoW usado en Bitcoin, ya que los mineros no pierden tiempo luchando unos con otros por validar el bloque más rápidamente.
Esto genera que la energía utilizada sea específicamente para validar transacciones con mucha más eficiencia tanto energética, como de costos, y mucho más aún de tiempos de espera.
A diferencia de las criptomonedas que utilizan PoW, para alcanzar el consenso de la red las cuales son propensas a 51% attack, los atacantes maliciosos tendrían que hacerse con el 51% de todos los activos disponibles, lo que lo hace muy costoso en sí.
Pero esto no es todo, una vez que se haga con esa cantidad de criptomonedas, tendrá que actuar en contra de la red con este tipo de ataque, lo que sin dudas derrumbaría rápidamente el precio del activo. El mismo activo el cual el atacante es el mayor hodler de esta criptomoneda. Teóricamente el atacante se vería disuadido a hacer este tipo de ataque por la mera razón financiera.
Para minar criptomonedas con este método de validación no se necesita costosos hardwares de minería, ni luchar con fuerza bruta para minar un bloque, a diferencia de Bitcoin (BTC). Además, con la unión de estos dos puntos se crean los incentivos perfectos para que los pequeños mineros se unan entre sí para juntar el mayor poder de cómputo posible.
El PoW ha ocasionado que se de un aumento en la centralización de la blockchain de Bitcoin, en donde unas cuantas compañías o pool de minería, en su mayoría ubicadas en China, se han hecho con inmensas cantidad de poder de cómputo. El poder de estas empresas es tal que si decidieran unirse, podrían validar y llevar en sus hombros la blockchain del BTC, sin necesidad que el resto del mundo participe en el proceso.
Estos graves casos de centralización teóricamente están eliminados con el Proof of Stake, ya que para ser parte de los Forgers sólo necesitas una conexión a internet, una dispositivo, sea una computadora, tablet o teléfono inteligente, y una participación distinta de 0 en la criptomoneda. Lo que le abre la puerta a muchos más posibles participantes, y a la disminución de la centralización tan análoga en el mundo de las criptomonedas.
Toda la rama tecnológica formada sobre PoS permiten la implementación de distintas soluciones para mejorar la escalabilidad de la red, sin disminuir ni un poco el nivel de seguridad de la blockchain y criptomonedas que se apuestan por este método de consenso.
Una blockchain con PoS, y sus forgers, puede llegar a procesar cientos de miles de transacciones por segundo, en comparación con las decenas o cuando mucho cientas de transacciones por segundo que pueden procesar las PoW. Esto ha llevado a que cada vez más proyectos estén decidiendo el camino de la prueba de participación, sobre el método de consenso original de PoW.
Algunas de las criptomonedas que han han desarrollado protocolos basados en PoS son: Ether (ETH), Dash (DASH), Tezos (XTZ), Lisk (LSK), Cosmos (Atom), Ark (ARK) y ZCoin (XZC), por mencionar algunos.
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