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Mientras Bitcoin y Ethereum refuerzan su poder como las dos criptomonedas líderes del mercado de activos digitales, cada vez son más los gobiernos que analizan seriamente la posibilidad de crear su propio CBDC (Central Bank Digital Currency). Lo que comenzó en Asia con China, Japón y Corea del Sur ahora llega a Rusia, con un posible lanzamiento de su moneda digital emitida por su Banco Central para el 2021.
Según explicó la directora del Banco de Rusia, Elvira Nabiullina, las autoridades analizan seriamente realizar una prueba de este tipo para finales del próximo año, tal como sucedió en países como Francia, Bahamas, por ejemplo.
“Consideramos que este proyecto es prometedor, encaja en el concepto de economía digital que se está construyendo actualmente en Rusia. Queremos evaluar el balance de riesgos y ventajas de tal proyecto antes de continuar ”, desarrolló Nabiullina, que después entregó un poco más de detalles sobre la decisión, según publicó Coindesk.
La directora del banco central expresó que las pruebas se llevarían a cabo en una región determinada y con únicamente un "conjunto limitado de usuarios", posible para finales del próximo año.
Actualmente Rusia, como todo el resto del mundo, se encuentra en una fuerte lucha contra la pandemia de Covid-19 y teme un gran rebrote como sucedió en otros territorios de la región. En las últimas 24 horas se registraron 16,710 casos para un total superior a los 1.15 millones (suma 26,269 muertos).
El Banco de Rusia actualmente está analizando los comentarios recibidos sobre el informe del del rublo digital, el cual fue publicado a principios de octubre y la determinación de si lanzará aún está en discusión.
En este nuevo proyecto económico no sólo se plantea la posibilidad de la emisión de una moneda digital propia, sino también del uso de la tecnología blockchain.
Con respecto a si las transacciones serán transparentes para los observadores, Nabiullina desarrolló que todavía eso no está decidido, aunque aseguró que buscan "la máxima confianza y la máxima confidencialidad".
Respecto al papel que jugará la CBDC local la directora del Banco Central declaró que el rublo digital no llegará para reemplazar el efectivo u otros métodos de pagos electrónicos. Las autoridades rusas quieren que sea un complemento a todas las formas de pago conocidas hoy en día.
“La gente decidirá por sí misma qué tipo de dinero para qué tipo de propósitos quiere usar. Las personas y las empresas quieren transacciones de pago rápidas, convenientes y casi inmediatas”, comentó Namiullina.
Según el informe publicado, el rublo digital:
"Estimulará la innovación y la competencia en el sector financiero y ayudará a garantizar que los fondos asignados a proyectos respaldados por el gobierno no sean malversados".
Si bien el rublo digital será un sistema novedoso para la economía rusa y colaborará para disminuir "la dependencia del dólar estadounidense" y evitar posibles sanciones, también plantea ciertos desafíos que el gobierno de Vladimir Putin deberá afrontar.
En primer lugar está el miedo al hackeo, la importancia de una ciberseguridad sostenida, y también la utilización offline, que no sea necesario una conexión a Internet.
Según comunicó Nabiullina, el Banco de Rusia baraja la posibilidad de hacer que el rublo digital esté disponible fuera de línea y también de manera online, aunque por el momento hay una solución tecnológica para esto.
Para incluir a todas las personas a este nuevo sistema financiero, el rublo digital estará acompañado de programas de educación financiera para que, sobre todo las personas mayores, sepan cómo utilizar esta forma de dinero que estará almacenado en billeteras virtuales.
Las autoridades recolectarán comentarios e información de las partes especializadas hasta el 31 de diciembre de 2020 y en base a todo ello se realizará la evaluación pertinente para poder desempeñar las pruebas. Dependiendo de los resultados de este piloto, se analizará medidas más importantes para el futuro.
Rusia utilizará el mismo proceder que el resto de los países del mundo: una pequeña prueba para mostrar la fiabilidad de este sistema para después ir a la carga de un esquema mucho mayor. El rublo digital promete ser una realidad en el corto plazo.
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