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Un grupo encabezado por el movimiento llamado “Ave María”, partidario de la firma Ripple, ha presentado una petición titulada “Nosotros el Pueblo” para que el gobierno federal declare el activo XRP como moneda digital, en respuesta ante la demanda que la Comisión de Valores y Bolsa de los Estados Unidos (SEC) ha interpuesto aduciendo que esta plataforma realizó una oferta de valores no registrada.
Los partidarios de Ripple señalaron que la (SEC) ha "presentado una acción frívola” basados en que XRP ya ha sido definido como moneda por la Financial Crimes Enforcement Network (FinCEN).
En la solicitud el grupo señaló que miles de millones de dólares de valor están siendo borrados del mercado debido al rápido deterioro de la capitalización del mercado de XRP, afectando directamente a miles de estadounidenses, gente que la SEC tiene la tarea de proteger, y que ahora por esto sufren daños y perjuicios irreparables.
La petición firmada anónimamente bajo las iniciales “J.W.”, fue presentada el pasado 29 de diciembre 2020, ya cuenta con la firma de más de 24 mil defensores de la XRP unidos a la causa. Por tanto, todavía se necesitan 75 mil firmas o una cifra superior para presentarla formalmente, puesto que se exige contar con 100 mil firmas como mínimo que la avalen, y así pueda ser revisada luego del 28 de enero de este año por parte de los ejecutivos de la Casa Blanca.
La petición surge a tiempo, porque la primera fecha estipulada para el juicio a Ripple se ha fijado para el próximo 22 de este mes.
El juicio previo entre la Comisión de Valores y Bolsa y Ripple se llevará a cabo por videoconferencia y la responsable, la Jueza de Distrito de los Estados Unidos, Analisa Torres, exige que ambas partes exhiban sus argumentos, incluyendo posibles mociones y la probabilidad de un acuerdo.
Ante este panorama legal que ha promovido la caída masiva de la cuarta divisa digital, XRP en el mercado, y que determinará el futuro financiero del XRP, Brad Garlinghouse, CEO de Ripple, señala como responsable a Jay Clayton, presidente de la SEC:
"La SEC ha permitido que XRP funcione como moneda durante más de ocho años, y cuestionamos la motivación para emprender esta acción solo unos días antes del cambio de administración"
Clayton abandonará su puesto a finales de este mes y se rumorea que su sucesor podría ser Gary Gensler, defensor de las criptomonedas.
"En lugar de proporcionar un marco regulatorio claro para las criptomonedas en los EEUU Clayton decidió inexplicablemente demandar a Ripple, dejando el trabajo legal real a la próxima Administración", indicó Garlinghouse sobre el caso.
Inspirada por el preámbulo de la Constitución americana, documento aprobado en marzo de 1787 en Filadelfia y en vigor desde 1789, la frase “Nosotros el pueblo” (We the people en inglés), se conformó como un movimiento que se fundamenta precisamente en esto, la historia constitucional estadounidense y tomó fuerza durante la administración de Barak Obama, estableciendo la posibilidad de crear peticiones que al contar con las 100 mil firmas en un plazo de 30 días podrían exigir a la Casa Blanca una respuesta oficial sobre cualquier planteamiento que se les hiciera llegar.
El pedido presentado por los partidarios de Ripple ante el gobierno federal, solicita que se “cese inmediatamente” la denuncia establecida por la Comisión de Valores y Bolsa de los Estados Unidos (SEC), porque perjudica irremediablemente a la moneda XRP.
La demanda de la SEC presentada el 22 de diciembre del 2020, señala entre otros puntos, que Ripple violó leyes de protección al inversor y recaudó fondos a través de la venta de activos digitales conocidos como XRP en una oferta de valores no registrados a inversores en EE.UU. y en todo el mundo.
De acuerdo al documento del SEC, Ripple supuestamente distribuyó miles de millones de XRP en un intercambio por contraprestaciones no monetarias, como mano de obra y servicios de creación de mercado.
Desde entonces se han hecho públicas varias declaraciones por parte de la firma, en las que se insta a los participantes el mercado a escuchar su postura y versión, y se aclara que seguirán operando y respaldando todos sus productos, tanto en EE.UU. como en el Reino Unidos, Japón, Suiza y Singapur, por ejemplo.
Una de las declaraciones expone el siguiente mensaje:
"El público y la prensa solo han escuchado la historia del lado de la SEC, y presentaremos nuestra respuesta en unas pocas semanas para abordar estas acusaciones no probadas contra Ripple".
La cabeza de la firma con sede en San Francisco, Brad Garlinghouse, asegura que esta demanda marcará importantes precedentes por cuanto esto influye a lograr el establecimiento de reglas claras para toda la industria en los Estados Unidos de América, mientras tanto, sigue defendiendo su postura de clasificar el XRP como una moneda y que por ello no es necesario un contrato de inversión con anterioridad a su transacción.
Para algunos expertos, este panorama legal puede seguir originando retrocesos para el XRP, y sostienen que hasta que se dé el dictamen final, la divisa podría seguir estancada. Otros lo consideran con la lupa del optimismo y confían en que la demanda tendrá un impacto limitado, porque el XRP ya enfrentó obstáculos regulatorios antes.
Por último, especialistas consultados por Bloomberg dicen que después de este retroceso el XRP puede consolidarse como una criptodivisa "segura" y que la demanda podría convertirse en un susto que da más oportunidades de entrada al inversor.
2021 un año en que el ecosistema empezó con movimientos y noticias de diversa índole, y ciertamente, muchos quieren ver qué pasa si Ripple gana el juicio, porque surge la duda: ¿podría el ámbito cripto podría beneficiarse con el XRP, afectaría que las monedas digitales no se clasificaran tan fácilmente como los valores?
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